SALTO DE RANA

A mis amigos más lejanos...

Escribir, dormir, morir
Deber, intervenir, traicionar
Comer la sangre bien cocida
Saberse la sintaxis de la soledad
La operación de exploración
se corrompe por tanto desembarco..

La rana hinchada de comer bichos
eructa un pixel indigesto
y anda tercamente excitada
por pisar vidrios rotos en cada salto…

Un mandril navegante encallando en ruinas circulares
Los obreros de la transcripción en plena
huelga de celo
La tracción es un efecto del compromiso
el daño colateral de mirarse entre rastrojos…

Logro quitarme los precipicios de encima
y acariciar la rana…

Brindar desde la viña fértil por el labriego anochecido
La rana ya no tiene noche donde emborrachar
su inflamante colecta
está desnudamente protegida en
la concha de la posteadora madre naturaleza
donde se esconden las perlas del demonio
y el conato de provocación donativa
sella las valijas de un extraño y sempiterno fuego fundador…

Pero el vino del tercer rumbo, el rumbo fijo
derrumba los atardeceres hasta despertarlos…

Y un poco de ternura levemente
ocupará toda la luz de la hoja en blanco…